VIVIENDA SANT POL DE MAR

Equipo

Arquitectos: Ignacio Martínez Molina
Colaboración: Elías Sans
Estructuras: José Luis Gutiérrez López.
Fotografias: Adriá Goula

Datos del proyecto

Ubicación: Sant Pol de Mar. Barcelona.
Superficie: 150 m2.
Cliente: Particular.

Fecha

Proyecto 2016 - Construcción 2024

Categoría
MV arquitectos, Residencial

Vivienda unifamiliar en casco urbano frente al mar. La parcela presenta unas condiciones de partida muy complejas:

  • Parcela de reducidas dimensiones entre medianeras y cuyo fondo trasero es una semi-excavación de una ladera de terreno, lo que la convierte en un fondo de saco.
  • La parcela está elevada sobre el nivel de la calle 2.25 m. por lo que el frente de parcela que da a la calle está ya construido con un muro de contención de tierras hasta esa altura. Este muro además tiene cierto valor patrimonial al ser centenario y estar terminado con un revoco de arena de playa, como se hacía en la tradición vernácula, por lo que el planeamiento obliga a mantener.
  • El acceso, por tanto, al no poder realizarse desde la calle se produce por una rampa semi-privada de 1.20 m de ancho, que viene desde la esquina de la manzana y pasa por delante de otras propiedades.
  • Los últimos 1.5 m del fondo de la parcela son parte de una ladera de terreno que además soporta la parcela de una vivienda vecina, que se encuentra a una altura elevada de 7 m. sobre nuestra parcela. Debido a las reducidas dimensiones de la parcela es necesario excavar ese 1.5 m de ladera para encajar la nueva vivienda. Esto, debido a la complejidad para meter maquinaria de excavación por la condición ed parcela elevada desde la calle dificulta mucho su ejecución.
  • La vivienda de la parcela trasera, situada 7 m por encima de nuestra parcela tiene además una servidumbre de vistas, lo que limita la construcción a dos plantas. Esto impide a la nueva vivienda continuar a la misma altura que las demás viviendas que forman el frente edificado de la manzana.

El cliente quería hacer dos apartamentos, como segunda residencia, uno para cada hijo. La normativa local no permite hacer dos viviendas en una parcela tan pequeña por lo que se ha hecho una vivienda pensada para poder funcionar como dos apartamentos superpuestos, diáfanos e iguales aunque con entrada común.

El proyecto aspira a servir de vínculo en el frente de manzana del que forma parte entre una arquitectura tradicional y otra más contemporanea, que encontramos a ambos lados de la parcela.

Con objeto de conseguir independencia entre los dos apartamentos, el balcón del piso superior se cierra perimetralmente de tal forma que por un lado enmarca las vistas el mar y por otro consigue reducir la posición dominante sobre la terraza del apartamento inferior. También se intentaba generar dos situaciones distintas y significativas para los dos apartamentos, lo que daba una cierta especificidad a cada uno y hacía más difícil elegir con cual quedarse.